FIRMA TOROS A DOS CACHANILLAS

MEXICALI, Baja California.- Los hermanos Carlos y Fernando Villicaña, fueron firmados la tarde de ayer por los Toros de Tijuana, organización de la Liga Mexicana de Beisbol.

El gerente deportivo de Toros, Jorge Campillo, hizo la entrega simbólica de las casacas y la firma de contrato para los dos lanzadores cachanillas que estuvieron acompañados de su familia y sus padres Maritza Morales y Carlos Villicaña.

“La tarea de nosotros es protegerlos de una lesión y darles seguimiento, ellos ya tienen el talento,  pero hay que tratarlos de llevar para que puedan cumplir sus sueños, somos una organización que nos preocupa mucho eso y más importante que sean de la región”, comentó Campillo.

Ambos lanzadores son salidos de la Liga del Seguro Social en la que jugaron para los Buzitos, han representado a Baja California en Olimpiadas Nacionales.

En 2014, Fernando Villicaña fue parte del equipo de México que participó en la Serie Mundial Cal Ripken en dónde lanzó un juego sin hit ni carrera.

“Como ellos son chicos todavía, ellos se van a quedar en casa todavía, nosotros tenemos un programa de lunes a viernes, vamos a poner a un preparador físico y los días libres se irán a Tijuana y periódicamente los vamos a evaluar”, agregó Campillo.

Cumplen su sueño

Cuando los hermanos Carlos y Fernando Villicaña jugaban en la Liga del Seguro Social, soñaban con algún día jugar pelota profesional. Ese sueño iba en serio y en parte ya se les cumplió.

Este sábado, los Toros de Tijuana firmaron a los dos lanzadores cachanillas para formar parte de un programa de monitoreo que los llevará a jugar pelota profesional.

“Este siempre fue mi sueño desde que empecé a jugar beisbol, me gustaría llegar a Grandes Ligas y yo se que con este proyecto me va a fortalecer y ayudar a cumplir mi sueño”, comentó Carlos Villicaña.

Ambos hermanos fueron visoreados en un Show Case realizado en el estadio Gasmart de Tijuana, casa de los Toros en el que fueron evaluados por scouts y la gerencia deportiva del club.

“La primera vez que estuve ahí, si estuve muy nervioso, porque sabía que esa era mi gran oportunidad, pero gracias a Dios aquí estoy”, agregó.

Con una felicidad que no podía ocultar, Fernando Villicaña también se mostró emocionado por cumplir una de sus metas.

“Me siento muy feliz, muy agradecido con mis papás, mis entrenadores y coachs por haberme entrenado y darme todos esos consejos que me sirvieron mucho la verdad”, comentó.

“Yo siempre me he esforzado mucho para cumplir mis sueños”, añadió, “uno de ellos era ser parte de un equipo de la Liga Mexicana y gracias a Dios se me cumplió”.

Padres orgullosos

En la misma firma con el club, estuvieron los orgullos padres, Martiza Morales y Carlos Villicaña, acompañados también del resto de la familia.

“Es un orgullo para uno que le ha dedicado tanto tiempo al beisbol, son unos niños para uno, pero gracias a todo el apoyo que hemos recibido de Jorge Campillo y el club nos da confianza en dejarlos en manos de un equipo profesional”, comentó Carlos Villicaña.

“Estoy muy feliz al ver que realizan uno de sus sueños que van paso a paso y muy contenta por ellos”, dijo la orgullosa madre, Maritza Morales.