Connect with us

Beisbol

Un pelotero distinto

Uci González ha ganado tantos trofeos como amigos en el beisbol. El veterano lanzador cuenta su historia y comparte su siguiente meta: jugar un estatal de beisbol en cuatro décadas diferentes

De entre todos los peloteros, Uci González es diferente. Es un paria dentro del ambiente del beisbol que domingo a domingo y durante décadas se entrega en el terreno de juego.

El veterano lanzador, que ha cosechado campeonatos en prácticamente todas las categorías, buscará en 2021 lanzar en un estatal de Primera Fuerza en cuatro décadas diferentes.

Este año se preparaba para conseguir esa meta personal, pero la pandemia frenó toda actividad deportiva y descansa para llegar la próxima temporada aún con suficiente beisbol para seguir activo.

González es distinto en varios sentidos. Era un lanzador que tiraba por debajo del brazo, disciplinado como pocos, conocido por su buen humor en el dogout aunque la situación en el terreno fuera adversa. Tampoco bebe, ni fuma.

Formado con los Buzitos de la Liga del Seguro Social, se ganó un lugar en sus equipos; primero como jardinero, después como cátcher hasta convertirse en lanzador, posición en la que comenzó la historia.

“El Valiente”, “El Diablo”, han sido apodos que se ha ganado con el paso del tiempo. En realidad, se llama Ucidides González-Pacheco, pero en los recortes de periódicos de hace más de 30 años, siempre ha aparecido como Uci González.

Uno de los campos de la Unidad Deportiva Nacozari lleva su nombre y le ha tocado levantar – al menos- 35 trofeos de campeón, más otros individuales de los que ya perdió la cuenta.

Uci González con la Liga Municipal de Ensenada en el campeonato estatal de la ALBM. (Foto: Cortesía)

Fue parte de aquella selección de la Liga Urbana que ganó los últimos campeonatos estatales de Primera Fuerza para el circuito azul, estuvo también en aquella épica bronca de 1999 contra Tijuana cuando era un solo beisbol en Baja California.

“Salimos escoltados aquella vez hasta la caseta de la salida de Tijuana, fue un pleito que quedó en mi memoria porque nunca me había tocado que mi familia estuviera en riesgo, nosotros decidimos decirles que se quedaran con el campeonato y no arriesgar más a nuestras familias”.

Esa bronca lo orilló a retirarse por un tiempo y emigró a la Liga Norte de Sonora a la que llegó a mitad de la temporada 2000 con los Misioneros de Sonoyta en la que fueron subcampeones al perder ante Algodoneros de San Luis.

En sus apariciones no le anotaron carrera y regresó al siguiente año en la que ganaron el campeonato en seis juegos. Terminó la temporada con 10-4, rompió el récord de ponches de la liga con 115 ponches y ganó el juego definitivo en el que enfrentó al ex grandes ligas Edgar González.

A invitación suya, compartió equipo con Agustín Murillo y Jorge Luis Castillo, el destino llevó a los últimos dos a ser firmados por organizaciones de Grandes Ligas.

Para Uci González, el destino tenía otros planes. Problemas federativos le frustraron a él y sus compañeros asistir a la Universiada Mundial en Italia y después vinieron lesiones que lo alejaron un tiempo de la pelota.

“Yo me preparé, me adecúe y lo importante fue correr y correr. Yo tengo valores que me dio mi mamá, no tomo, no fumo, siempre me ofrecían y siempre dije que no. Ahora que estamos en festejos ya lo que me ofrecen es soda. Aunque si es complicado”.

Creció con la “Fernandomanía”. Aún recuerda que en un juego en Dodger Stadium vieron a Fernando Valenzuela en el bullpen mientras calentaba, le gritaron y el “Toro” volteó para saludarlos. Su historia lo inspiró. Mientras que lo alegre lo emuló de “Houston” Jiménez.

“Yo me identificaba con él (Jiménez), dije si él puede yo también, y así he jugado hasta estos 45 años. Siempre he intentado jugar de una forma divertida”.

En su regreso al beisbol después de las lesiones, volvió a lanzar. Descubrió que aún su brazo podía dar algo todavía y ha dado quizá de más. Fue campeón con la Liga Amateur que en 2016 rompió una sequía de 20 años sin ganar un estatal de Primera Fuerza, después anduvo con Ensenada y todavía el año pasado con la Liga Poniente.

“Mi plan este año era llegar a lanzar durante cuatro décadas diferentes en estatales, este año quería hacerlo, pero bueno me voy a preparar para el siguiente año, es algo complicado, pero creo que si lo voy a hacer”.

Aún tiene la energía de un novato. Viaja los fines de semana a Hermosillo para jugar en la Liga de Veteranos. Sale los sábados por la noche, tras un viaje de casi diez horas llega para desayunar, va al campo de beisbol y por la noche regresa para el lunes estar listo en el trabajo.

Es un nómada, dice, no le gusta estar en una oficina, siente la necesidad de moverse, de salir y por eso el beisbol sigue dentro de sus planes como jugador activo y no desde otra trinchera.

“No pienso retirarme del beisbol todavía, ni pienso manejar. Hasta que mi cuerpo me impida hacerlo”.

Cronista deportivo con más de diez años de experiencia. Ha trabajado para La Crónica de Baja California y La Voz de la Frontera. Contacto: gilberto.giron@expresodeportivo.com

More in Beisbol